jueves, 13 de enero de 2011

La larga uña de la totovía

 Pata de totovía (Lullula arborea) 
Nikon D300+ Tamron 90mm f2.8 (ISO 400, f25; 1/250; -0,1 eV) 
Parque Natural de Cornalvo (Badajoz)

Las jornadas de anillamiento te permiten retener a las aves durante unos instantes y disponer de una excelente oportunidad para fijarte en algunos detalles en los que no sueles reparar. El verano pasado, en una salida que tenía como objetivo el seguimiento del paso migratorio del mosquitero papialbo en el Parque Natural de Cornalvo (Badajoz), capturamos una totovía (Lullula arborea), especie que no suele caer mucho en nuestras redes. Aunque he observado esta especie en infinidad de ocasiones, me sorprendió el desmesurado tamaño de la uña de su dedo posterior.

 
Totovía (Lullula arborea)
Nikon D300+ 600m4 (ISO 200, f7.1; 1/500; -0,33 eV)
Dehesa de Tres Arroyos (Badajoz)

Esta característica la comparte sólo con algunas especies de su misma familia (Alaudidae), como la alondra (Alauda arvensis) o la calandria (Melanocorypha calandra), pero no es un rasgo que se pueda considerar diferenciador y común a todas las aves incluidas en este grupo taxonómico. En otras familias de aves, como la de los bisbitas y lavanderas (Motacillidae), hay varias especies que también exhiben unas distintivas uñas de gran longitud y pronunciadamente arqueadas (desmesuradas en el bisbita de Richard o en el bisbita de Godlewski, dos aves muy raras en la península ibérica).

Siempre pensé que estas peculiares uñas tendrían relación con sus hábitos terrestres, ya que tanto los aláudidos como bisbitas y lavanderas son especies muy vinculadas al suelo y con excelentes capacidades para correr o caminar con rapidez. Pero, curiosamente, la mayor parte de las aves corredoras han evolucionado al contrario: disminuyendo el tamaño de la uña y del dedo posterior, que en ocasiones quedan reducidos a la mínima expresión. Este sería el caso del alcaraván, la perdiz roja, la avutarda, el sisón y la mayor parte de los limícolas. La máxima expresión la encontraríamos en las aves que no pueden volar, como la avestruz (rara también en la península ibérica), tan especializada en la carrera que ha desarrollado un enorme y poderoso dedo central (el 3º),  mientras que los restantes se han reducido (el 4º) o han desaparecido (el 1º y el 2º).

 

Pata de avestruz mostrando el hiperdesarrollo del 3º dedo (en la imagen de la izquierda se aprecia también el 4º dedo, vestigial y sin uña)

Para complicarlo más, otras muchas especies que no son corredoras también presentan un dedo posterior diminuto, como ocurre en las anátidas, gaviotas, charranes y canasteras, por ejemplo. En estos casos, el dedo posterior tampoco desempeña ninguna función específica y ha perdido casi toda su funcionalidad. Sin embargo, las anátidas (patos, gansos, cisnes, etc..) han desarrollado membranas entre los dedos delanteros para favorecer la natación, siendo una necesaria adaptación a la vida acuática, donde resulta más interesante nadar que correr.
En fin, que aún no he conseguido encontrarle sentido a la larga uña de la totovía…pero lo que sí está claro es que todo tiene una razón en la naturaleza!

Pata de ánade real con mebranas interdigitales y dedo posterior reducido


La totovía es una curiosa especie también en sus costumbres, ya que es el aláudido  que más decididamente se ha atrevido a ocupar hábitats forestales y con cobertura de matorrales. No duda en aprovechar  cualquier claro en los bosques, siendo muy abundante por ello en las dehesas, donde el pastizal, el matorral y los árboles presentan un característico equilibrio. Muy al contrario, el resto de los representantes de su familia (alondras, cogujadas, terreras y calandrias) muestran una marcada selección de hábitat hacia terrenos estepáricos, cultivos de secano y zonas con predominio de los pastizales, evitando siempre las zonas arboladas. Sólo habría que hacer una salvedad con la cogujada montesina (Galerida theklae), que también puede ocupar hábitats arbolados o con matorrales.



Cogujada montesina (Galerida theklae) 
Nikon D300+ 600m4 (ISO 200, f8; 1/640; -0,33 eV)
Carmonita (Cáceres)

Por esta razón es frecuente que veamos a totovías y cogujadas montesinas posadas en las ramas y copas de árboles, comportamiento que es infrecuente en sus parientes más cercanos. De hecho, incluso el nombre científico de la totovía (Lullula arborea) hace alusión a su vinculación con los hábitats arbolados.¿Pudiera ser que esta larga uña en el dedo posterior les resulte útil a las totovías para posarse y sujetarse con mayor facilidad alas ramas de los árboles? Si alguien le encuentra una explicación, le agradecería que me sacase de dudas!

 Totovía (Lullula arborea)
Nikon D300+ 600m4 (ISO 200, f7.1; 1/500; -0,33 eV) 
Dehesa de Tres Arroyos (Badajoz), con mejor luz que la anterior

También os dejo este interesante enlace lleno de referencias sobre las denominaciones de la “totovía” a lo largo de la historia http://palabraria.blogspot.com/2010/12/totovia.html

10 comentarios:

  1. Tremendo. Es notorio que yo en aves estoy bastante pez, pero mientras te leía llegaba a la misma conclusión sobre la utilidad de esa uña a la que al final llegas tú. Lo mismo quiere decir algo.
    Un saludo

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  2. Que lo mejor para correr es reducir el número de dedos, dejando sólo los delanteros, parece que es algo en lo que coinciden mamiferos y aves y debe ser algo realmente eficaz. Lo de ayuda para posarse no lo veo. A mí se me ocurre otro motivo, extender la superficie de sustentación como raquetas de nieve o como las Jacanas. Si alargas los dedos por delante correras mal y la Totovía tiene que correr. Lo que no sé para que serviría esto. Aunque igual, despues de todo es otro de esos rasgos que se van manteniendo sin ninguna función evolutiva.
    En resumen, que no te puedo dar una respuesta. Un saludo.

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  3. Hola Atanasio, muy interesante,y además también me gusta mucho siempre buscar respuestas al por qué suceden las cosas en la naturaleza... Pues a mi se me ocurren dos hipótesis;

    - la primera sería que, en vez de para sujetarse mejor a las ramas de los árboles puede puede que al contrario, me explico..., al ser una especie que también habita los suelos, pues puede que use esa prolongación de uña y dedo para andar mejor por zonas encharcadas o con vegetación, y se me ocurre esto fijándome por ejemplo en las aves acuáticas que andan por láminas someras de agua entre cañizos como el calamón, gallinetas..., no es que eta especie ande por láminas de agua pero puede que sí habite campos encharcados y esto le hace no undirse en el barro...

    - como segunda hipótesis, pues puede que tenga que ver algo con la alimentación, a esto no le doy ningún razonamiento solo pensando que a lo mejor podría servirle como una herramienta, pero desconozco de qué se puede alimentar, imagino que insectos, y si esto le serviría...

    Un abrazo...

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  4. Nacho, yo como Salomé, también estoy bastante pez en esto de las aves, pero me gusta tú hipotesis y tambien la de Esmeralda me parece muy acertada.
    Oye las fotos sensacioneles.
    Un abrazo

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  5. La ipotisis que varajas parece acertad
    Y las fotografias magnificas

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  6. Olé, tanto por el documento como por las fotos. Sobre todo la penúltima es muy buena. También me fijé en esa "pata de dinosaurio"... buen test para apreciar el tratamiento (muy natural) que das a tus fotos. Un saludo,

    Ramón García Durán

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  7. Hola.
    Vaya, están buenas las fotos.
    Podemos ver detalles que en un lapsus "normal" no es posible conocer-observar.

    Gracias.
    Cuidate.

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  8. Para encontrar la respuesta quizás deberíamos ver si tanto machos como hembras poseen la misma longitud en la uña. ¿Existe dimorfismo sexual al respecto?. Si es así entonces ya tienes la respuesta. En mi opinión, la respuesta debe ir por ese camino. Para andar por el suelo desde luego no es práctico una uña tan larga, y para agarrarse a las ramas no sirve para nada puesto que no está articulada.

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  9. Buen trabajo y bien documentado,te felicito.un saludo.

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  10. Buenas fotos y como siempre excelente testo, siempre interesante y agradable de leer.

    Respecto a la funcionalidad de la uña de le totovía....Pues a bote pronto ni idea, pero eso de agarrarse mejor a las ramas no me convence mucho, si no otras especies arbóreas de su família ¿Por que no la tienen? ¿Por que ningín coraciforme la tiede? Creo que para esto ya es suficiente la presencia de un dedo posterior.

    Igual no tiene ninguna función y se debe a un rasgo hereditario que contemple un desbarajuste genético o metabólico puntual en el que por ejemplo no se despolimerice la queratina o los filamentos que forman las uñas....

    Un saludo Atanasio

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